ALBA les preparó una sorpresa, debían seguir las pistas y buscar en la planta baja del edificio y en distintas estancias las partes de un esqueleto que luego debían montar.
También vino SARAH, la mamá de ESTELA, que como ya sabéis es de Irlanda del Norte. Nos contó que es una fiesta ancestral, de origen celta y especialmente irlandesa, pero que se ha extendido por todo el planeta. Nos ha enseñado tarjetas y vocabulario en inglés.
Al principio, el significado del disfraz era para engañar a la muerte, así cuando venía, no te reconocía y no te llevaba con ella. Al principio utilizaban nabos, que dejaban huecos y los utilizaban como farolillos con velas dentro. Pero cuando llegaron a Norteamérica vieron que era mucho mejor y la adoptaron, así se extendió su uso por todo el mundo (la calabaza es de origen americano; en Europa no se conocía).
El papé de Estela nos preparó una que quedó así de bien:
Sarah nos enseñó un juego típico irlandés; aprovechando que la manzana es una fruta que se recoge en OTOÑO y esta fiesta se celebra es esta época, se ponen en un barreño con agua y hay que cogerla con la boca, sin tocar con las manos (ALBA, la hermanita de Estela, fue la primera que se animó); después se las han comido. Se lo han pasado pipa; bueno, mejor que lo veáis...
Después hemos bailado con nuestras máscaras de calabaza... ¡Es difícil distinguir quién es quién!